jueves, 4 de agosto de 2011

La temporada de las despedidas

Fui a ver Harry Potter con mis amigas de la Universidad, mis 2 mejores amigas de la vida. Esas que saben todo de mí y que conocen hasta la cara que pongo cuando trato de disimular que algo no me gusta.

Todas las películas de Harry Potter las hemos ido a ver las tres juntas. Es una especie de rito. Cuando éramos universitarias, Ale llegó con el primer libro del niño-mago y desde ahí, ninguna de las 3 pudo resistirse a sus encantos: nos convertimos en voraces lectoras y puntuales peregrinas a los estrenos de cada película. Siempre así, las tres juntas.

Y esta vez no podía ser diferente. Tampoco porque esta película era la última, como una especie de alegoría de lo que va a pasar en poco tiempo. Mientras estábamos en la fila, Ale, la que descubrió a Harry Potter dijo “Se dan cuenta chicas? Posiblemente esta es la última vez que vayamos las tres juntas al cine en harto tiempo!”

Y se me apretó la garganta. Ale tenía razón! Entre los preparativos de última hora del viaje, la inminente llegada del rucio, que viene a trabajar por tres semanas en Santiago-lo que me tiene hondamente feliz-, y las despedidas varias de familia, amigos no tan cercanos y gente de la oficina, probablemente las exiguas 3 semanas y media que me quedan en Chile no me den para otra salida al cine, snif!

Esa fue la primera despedida que he tenido, la del cine con las chicas. Y la disfruté a concho: Me reí con la película, lloré en la parte que Harry Potter invoca los espíritus de su difunta familia con la Piedra de la Resurrección, y aplaudí al final como uno hacía antes en el cine.

Ahora, con ésta, se abre la temporada de las despedidas.

2 comentarios:

Javier dijo...

Me contaste el final!

TE PASASTE!

Ah no :'(

Bárbara dijo...

No es el final (de hecho lo que conté ni siquiera es importante), y además, mal por ti que no hayas leído el último libro, que es tan bueno!!! Besos!